Investigadores del Instituto Nacional de Estándares y Tecnología (NIST) han fabricado un dispositivo novedoso que podría impulsar drásticamente la conversión de calor en electricidad. Si se perfecciona, la tecnología podría ayudar a recuperar parte de la energía térmica que se desperdicia en los EE. UU. a un ritmo de alrededor de $100 mil millones cada año.
La nueva técnica de fabricación, desarrollada por la investigadora del NIST Kris Bertness y sus colaboradores, consiste en depositar cientos de miles de columnas microscópicas de nitruro de galio sobre una oblea de silicio. Luego se eliminan capas de silicio de la parte inferior de la oblea hasta que solo queda una fina lámina del material. La interacción entre los pilares y la lámina de silicio ralentiza el transporte de calor en el silicio, lo que permite que una mayor parte del calor se convierta en corriente eléctrica.